Testimonio: Una hermosa historia…

manos_110810

Hablando de el poder «de la fe» -mas allá de la confesión religiosa- es notable destacar cuan numerosos son los «testimonios» de personas que han visto en su vida, moverse a su favor la mano de Dios.

No deberia asombrarnos, puesto que el Dios que Jesucristo nos revela con su vida y enseñanza, es uno que quiere el bien para todo ser humano, creado a su imágen y semejanza.

Este «favor de Dios» se manifiesta siempre a través de la oración. Hay poder en la oración. En la oración sencilla y sin complicaciones. No hablo de las letanias religiosas, que con todo respeto opino, deben «aburrir» al mismo Dios amoroso del que estamos hablando. Jesús que vino para acercarnos a Dios dice algo muy importante respecto a esta clase de oración:

22. Respondiendo Jesús, les dijo: Tened fe en Dios.
23. Porque de cierto os digo que cualquiera que dijere a este monte: Quítate y échate en el mar, y no dudare en su corazón, sino creyere que será hecho lo que dice, lo que diga le será hecho.
24. Por tanto, os digo que todo lo que pidiereis orando, creed que lo recibiréis, y os vendrá. San Marcos 11:22-24
El siguiente pp.s es un testimonio de lo que puede lograr una sana determinación de salir adelante, aún en circunstancias extremas. Alli es cuando la oración toca el corazón de Dios. Y «su favor» comienza a visitarnos. ¿Porque no esperar un milagro en la circunstancia que estás viviendo? No importa cuan grande parezca ser la montaña. Cuando un hombre de fe se planta ante ella, no le queda mas remedio que desaparecer. ¡¡Animo !! DIOS ESTA CONTIGO. ¡ESPERA MILAGROS!

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Scroll al inicio