Es sorprendente el vigor que puede darnos el comprender los desafíos. Saber que con esfuerzo y superación personal podemos podemos alcanzar nuestras metas. Se trata de crecer personalmente en las diferentes etapas de nuestra vida. Saber por sobretodo que una actitud persistente y positiva nos dará siempre la victoria. Por momentos en medio de la carrera podemos desanimarnos, porque no vemos el final, pero continuamos esta etapa con una visión porque «por fe andamos no por vista», nos dice San Pablo. Ciertamente fe y acción conforman un caracter determinante. ¡Adelante y consigue tu sueño!
De eso es lo que trata absolutamente todo…