…. que ilustra… ¡LA VERDADERA AMISTAD!
A veces el camino de la vida puede volverse «solitario». Y este pensamiento parece incongruente con el hecho comprobado que nuestra «raza humana» es eminentemente una vida de relaciones. Porque eso implica todo lo que le da estímulo a una vida llena de desafios. Solo cuando aprendemos a vivir relacionados con nuestro «prójimo», aprendemos a dar para recibir. Somos incompletos sin «amor», del cual nace el afecto que nos ayuda a vivir.
Solo compartiendo «con el otro» aprendemos a vivir. Aprendemos a confiar. Porque mas allá de las desiluciones que podamos haber vivido, nunca podremos tener verdaderos amigos, ni no aprendemos el arte de la aceptación.
Poco a poco aprendemos que solo están solos quienes deciden estarlo. Cuando nuestra actitud hacia las personas es positiva, entonces aprendemos a valorar todo lo que ellas son y lo que pueden alcanzar a ser. Es nuestra actitud hacia las personas la que determinara que clase de vida social alcanzaremos. El sabio Salomón lo expresaba de esta manera:
Claro que la palabra AMISTAD es especial, seguramente que aplicada rigurosamente descubriremos que no se puede tener multitud de amigos. Pero si muchos conocidos, compañeros etc. Lo bueno es que los verdadero amigos son un verdadero DON DE DIOS. Y como toda relación hay que alimentarla. Salomón dice cómo: ¡Mostrándonos amigos!
Asi que el siguiente pp.s nos ayudará a entender mejor el amor que demuestran los verdaderos amigos. ¡Un abrazo! y disfruta de TUS VERDADEROS AMIGOS!
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